Señor, en Ti yo creo Y siempre creeré; Que brilla dentro del alma La antorcha de la fe. Al cielo, ¡cuántas veces La vista, en mi aflicción Volví, y dulce consuelo Bajaba al corazón! Coro: La gloria es para tí Bendito Salvador, Tu me salvaste a mí, Salvado soy, salvado soy. ¡Oh!, cuando en torno miro No encuentro humano ser Que mis dolores pueda Calmar ni aún comprender, ¿Cómo curar la herida, Como aliviar la cruz, Si el alma no inundara De fe la Santa luz? | Es grato, si sufrimos En horas de ansiedad, Saber que desde el cielo Nos miras con piedad; Que cuentas nuestras penas, Que ves nuestro dolor, Que escuchas nuestros ayes Y envías tu favor. |